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Moët & Chandon, Hennessy, Chandon, Veuve Clicquot, Dom Pérignon, Volcán de mi Tierra, Belvedere, Glenmorangie, Terrazas de los Andes y Numanthia fueron los grandes protagonistas de la noche.
Moët & Chandon, el champagne más amado en el mundo, – ¿Sabías que cada segundo que pasa se destapa una botella de Moët & Chandon? – sorprendió presentando una atrevida forma de disfrutar de las deliciosas burbujas: la nueva coctelería a base de Moët Nectar Impérial dentro de lo que parecía selva en medio de la Ciudad de México. La icónica vending machine de Moët & Chandon no podía faltar en la celebración, los invitados pudieron disfrutar de toda la experiencia que esta brinda al momento de meter el token a la máquina.
En el espacio de Hennessy se prestentaron los icónicos cocteles de Hennessy Very Special con ingredientes originales: Hennessy Tiki con maracuyá, Hennessy Ginger Spicy, y Hennessy Coco con agua de coco, los cuales fueron los grandes protagonistas del espacio. Dentro de un black room, los invitados pudieron experimentar un tasting privado de Hennessy X.O, el primer cognac clasificado como X.O o Extra Old por un proceso extendido de envejecimiento por 30 años en barricas de roble francés acompañado del maridaje perfecto con trufa de chocolate amargo.
Veuve Clicquot, el champagne más trendy y divertido, contó con todo el #ClicquotStyle que tanto lo caracteriza, desde el momento que llegabas al espacio este te invitaba a disfrutar del mismo, y unirte a la celebración por su aniversario número 200 al poder tomar una brocha de pintura y dejar tu huella en la historia de esta gran casa francesa. Con la icónica ancla podías tomarte la mejor foto del evento con amigos o pareja y disfrutar de una deliciosa copa de Veuve Clicquot Carta Amarilla, Rosé o un divertido coctel con Veuve Clicquot Rich.
Clientes, amigos de las marcas, socios, influencers y más, pudieron disfrutar de todas las novedades que trae cada una.
Al momento de entrar a Dom Pérignon, los asistentes podían deleitarse de una copa de Dom Pérignon Rosé 2005 y Jamón Jabugo mientras les contaban la fabulosa historia de la casa francesa y sus conceptos más sorprendentes. El espacio minimalista, intervenido por espejos e inspirado en la esencia de la marca reflejó la intensidad y complejidad que tiene la misma. Una de las paredes te transportaba al lugar emblemático de Dom Pérignon, Abadía de Hautvillers, lugar donde Dom Pierre Pérignon se propuso la misión de crear el mejor vino del mundo, logrando así el impactante y único champagne Dom Pérignon como hoy lo conocemos.
Definitivamente una noche espectacular.
Gentileza: a!Diseño
